Eduardo Jáudenes de Salazar (CEO de ESCENADEI)
El Teatro de la Zarzuela llega a la programación de Veranos de la Villa del Ayuntamiento de Madrid, y lo hace por todo lo alto con su producción Zarzuela en danza, un espectáculo teatral diferente planteado como una fiesta que alegra el Patio Central del Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque
ZARZUELA EN DANZA es un espectáculo de asistencia obligada para todos los amantes de la zarzuela y la danza
Rigurosa dirección
Una impecable producción
Todos los bailarines están magiatrales en sus respectivos cometidos
Mereció la pena, sin lugar a dudas, montar y ver esta función.
Una obra que no te puedes perder bajo ningún concepto.
Sin reiteraciones innecesarias, una gran construcción escénica.
Se trata esta de una historia que recorre algunas de las más atractivas escenas de baile y danza de la historia de la Zarzuela, con la irrenunciable compañía del canto y la emoción mágica de un texto que también baila, concebido por el polifacético y reconocidísimo dramaturgo Álvaro Tato. El argumento echa a andar en brazos de un enigma: “Un bailarín tiene un sueño recurrente en el que persigue a una sombra misteriosa”. José Antonio Irastorza, al frente de la Orquesta titular de la Compañía Lírica Amadeo Vives, será el director musical de este montaje que cuenta con la dirección musical y la coreografía de Nuria Castejón.
En Zarzuela en danzas se podrá disfrutar de obras maestras que para ser danzadas de Bretón, Chapí, Chueca, Vives, Giménez, Soutullo y Vert, Lleó, Lleó o Roig, con el añadido de alguna nueva canción popular.
Los bailarines son Cristina Arias, Marián Alquézar, David Acero, Ángel Capel, Andro Crespo, María Ángeles Fernandez, Lucía Fernández, Olivia Juberías, Daniel Morillo, Carla Prado, Luis Romero y Cristian Sandoval. Cuenta con la escenografía de Carmen Castañón, el vestuario de Gabriela Salaverri y la iluminación de Eduardo Bravo. Eduardo Cortés, a la guitarra flamenca y al cajón flamenco, acompañará a en escena a la compañía.
Zarzuela en danza es también tradición. Tradición de raíces profundas. Tradición por los cuatro costados. Tradición en cada poro abierto. Enseñanza de un aprendizaje que viene de lejos; de quienes fueron maestros y antes discípulos de otros maestros que a su vez fueron discípulos, y así hasta los límites del conocimiento. Nuria Castejón quiere así rendir homenaje a la prodigiosa herencia de sus padres: “el amor a la zarzuela y, al mismo tiempo, a mi profesión”, porque la zarzuela nos ha acompañado a lo largo de nuestras vidas, “como parte discreta y permanente de nuestras pasiones comunes y nuestros paisajes cotidianos”. Y avisa a navegantes: “Este es un espectáculo que los amantes de la zarzuela y de la danza no deben perderse, es un emocionante viaje a través de los parajes y horizontes de la Zarzuela, contado desde la Danza”.
Ambos directores proponen, a través de la dramaturgia creada por Álvaro Tato, un paseo que tiene como excusa y principio de aventura ese sueño del bailarín que persigue una sombra y que deriva en un viaje de varios siglos, en una travesía que recorre los diversos estilos de danza que han jalonado la historia del género lírico español.
Mas reportajes, criticas y reseñas en