Eduardo Jaudenes de Salazar (CEO de ESCENADEI)
La apuesta por la danza en Veranos de la Villa continúa un año más con el Patio Central de Conde Duque como escenario principal. En esta edición que celebra el 40º aniversario del festival, el flamenco está representado por la compañía de Úrsula López, exdirectora del Ballet Flamenco de Andalucía, y su Naturalmente Flamenco, un montaje que es también una manera sincera y auténtica de mostrar este arte patrimonio de la humanidad.
El espectáculo es el resultado de conjugar la ilusión, el conocimiento y la destacada sensibilidad del elenco de esta compañía, profesionales que viven apasionados por el flamenco y que tienen mucho que contar sobre este arte. Con la colaboración coreográfica de Rubén Olmo —exdirector del Ballet Flamenco de Andalucía, Premio Nacional de Danza y director del Ballet Nacional de España desde 2019— y la dirección artística de López, queda patente en esta propuesta el proceso de creación continua en la tierra donde nació el flamenco que hoy conocemos.
A lo largo de los siete números que conforman este Naturalmente Flamenco, se suceden gran cantidad de palos del repertorio de una manera elegante en un trabajo coreográfico que plasma que, a estas alturas de la historia, el baile flamenco forma parte de la naturaleza y de la vida misma, sin más riendas que la disciplina que debiera enseñar a sus artífices a ser sencillamente naturales.
Una impecable producción de Úrsula López – Compañía de Flamenco
Todos los artistas están magistrales en sus respectivos cometidos.
Cuando vemos este espectáculo y vivimos la borrachera de los sentidos, que nos enseña a vivir, comprobamos la diferencia entre espectáculo, arte y arte fascinante: el espectáculo se convierte en arte cuando absorbe los sentidos del espectador y el arte en fascinante, cuando además de los sentidos absorbe su alma y consigue abrir los corazones a la emoción, parece que la técnica lo abarca todo pero de nada sirve si no está al servicio del arte, ese pequeña línea, pero importantísima, que separa el mero espectáculo del arte fascinante, eso solo se logra cuando se interpreta con amor, buscando la perfección, la belleza y el buen hacer, se da plenamente en este espectáculo, donde prevaleció en todo momento la estética, la pasión y el buen flamenco.
Flamenco, lleno de arte, poesía, virtuosismo, emoción, embrujo, colorido, belleza, fuerza, calor, alegría, pureza, alma flamenca, donde los intérpretes viven apasionadamente lo que cantan e interpretan y saben transmitirlo a los espectadores.
Todos los elementos permiten dejarnos llevar por la interpretación y la música, haciendo funcionar las neuronas espejo y creándose una comunicación entre la obra y los espectadores. Ese punto mágico de absorción del oyente que sólo las grandes interpretaciones consiguen, donde los espectadores se convierten en energía musical. No en vano el flamenco es patrimonio inmaterial de la humanidad y lleva sentimientos humanos al aire.
En flamenco todos se mueven alrededor del bailaor desde las palmas, a la guitarra, pasando por la voz, o el propio ritmo, el bailaor es el centro del universo, pues su taconeao de se convierte en un instrumento de percusión capaz de crear emociones en el público.
En el flamenco las manos son el aire, como cisnes etéreos y zigzagueantes, pero con los pies, el taconeo es la fuerza de la tierra acechante, el arte en toda su figura, uniendo tanta armonía, embellece el aire que rodea, esos movimientos tan bellos, que llevan tan adentro, sombrean todo lo que le rodea, con solo mover sus cuerpos, lo que encierra tanta belleza, brota sin ellos saberlo, con ese gran poderío, que van derramando, al compás del taconeo, cuando estan bailando, lo hace sentir tanto, que el suelo tiembla, porque quiere abrazadlos, esa gracia infinita, que siempre perdurara, cuando nace de verdad, ese arte tan grande, Que dios les dad.
Un espectáculo flamenco que no te podías perder bajo ningún concepto.
Una acertadísima programación de los Veranos de la Villa que nos hace disfrutar cada noche de este verano 2024 y que no para de sorprendernos favorablemente.
Flamenco éste, el de Úrsula López que nos roba el alma, convirtiéndolo en arte fascinante.
FICHA ARTÍSTICA
Dirección artística: Úrsula López
Cuerpo de baile
Baile, repetidora: Julia Acosta
Baile: Aitana Rousseau, Miranda Alfonso, Andrea Antó, Manuel Jiménez, Federico Núñez, Iván Orellana y Jesús Hinojosa
Cante: Juan de Mairena y Sebastián Cruz
Guitarra: Pau Vallet y Juanma Torres
Coreografías: Úrsula López y Rubén Olmo
Música: Música popular y folclore
Música original: Juanma Torres y Pau Vallet
PROGRAMA
1. TUÉTANO
Romances, bulería, jaleos
Coreografía: Rubén Olmo y Úrsula López
2. EN SOLEDAD
Farruca
Coreografía: Úrsula López
3. PIEL Y ARENA
Tientos
Coreografía: Úrsula López
4. RAÍZ
Seguiriya
Coreografía: Rubén Olmo
5. DULCE CAÑA
Caña
Coreografía: Úrsula López
6. ALEGRÍAS DE CÓRDOBA
Alegrías
Coreografía e intérprete: Úrsula López
7. AYER Y MAÑANA
Folklor de Morón
Coreografía: Rubén Olmo
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