Eduardo Jáudenes de Salazar (CEO de MUSICAS)

El CONCIERTO DE LA OSM fue de asistencia obligada para todos los amantes de la música.
En el programa:
Richard Strauss
Las alegres travesuras de Till
Eulenspiegel op. 28
•
Joseph Haydn
Concierto para violoncello y
orquesta op. 101 en Re Hob.VIIb:2
Simon Veis, violoncello
•
Carl Nielsen
Sinfonía Nº 2 op. 16
Simon Veis, violoncello demostró ser un artista preparado, con calidades extraordinarias, luciendo primorosa y riquísima técnica, plural variedad de matices y personalidad arrolladora.
Se lució plenamente abordando detalles que avalan su clase. Libertades en el uso de la forma y el color que se integran perfectamente en el conjunto.
El director Pablo González guió con brillantez, precisión y firmeza admirables. Materializa lo que sugiere con rapidez y precisión.
La OSM tocó muy bien y la música fluyó con vivacidad.
Las distintas familias orquestales: cuerdas, metal, percusión, viento, madera estuvieron perfectamente niveladas.
Delicada, cuidando los detalles.
La orquesta se lució plenamente.
Desprendió contagiosa fuerza, plena y poderosa.
Plena de belleza, trasmitiendo emociones físicas.
No puede sorprender a nadie la clase magnífica de la orquesta.
Modelos de quietud, atención, respeto y disciplina.
Medida justa de virtuosismo y sentimiento.
Segura y firme.
Sólida de sonido y técnica.
Sonó con noble calidad, sólida, brillante.
Mereció la pena, sin lugar a dudas, montar y ver este concierto.
Un concierto que no te podías perder bajo ningún concepto.
Mas reportajes, criticas y reseñas en










